Un buen final para una buena comida

Un buen final para una buena comida

Con una buena comida pasa lo mismo que con una buena película o un apasionante libro: tiene que tener un final que deje huella…

¿Te podrías imaginar ir a ver una película de la que realmente estés disfrutando y salir del cine antes de que seas testigo de la última parte de la trama? Pues tan incomprensible como puede parecer que alguien haga tal cosa, es también que una persona que esté disfrutando de una rica comida se quede sin ponerle un broche final a la altura. Sabemos que no siempre se tiene la misma cantidad de tiempo para comer. Sin embargo, en versión extensa o concentrada nos podemos asegurar de que cuando nos visites en La Cecilia de Allende tengas una experiencia redonda.

En este sentido, una vez hayas disfrutado de tus platos favoritos mientras participabas de una acalorada y divertida conversación, y tras haber degustado un dulce bocado para recordar los pequeños placeres de la vida, toca elegir ese último elemento que hará de tu comida algo memorable: un licor.

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En esta ocasión, te proponemos uno que no sólo es precioso a la vista, y delicioso y aromático al paladar, sino que además posee propiedades digestivas: un licor de hierbas con orujo. Dicen de esta “pócima” de color casi “fosforito”, que antiguamente los campesinos solían tomarlo después del desayuno y antes del trabajo en el campo al amanecer, como quien la usara para activarse y ponerse en marcha. Sin embargo, actualmente está muy extendido su consumo en restaurantes después de las comidas, ya que dispone de propiedades digestivas.

Así que si aún no lo has probado o en las últimas veces que has visitado nuestro restaurante de Madrod Chamartín no has dispuesto del tiempo para regalarte un final redondo, no dudes en pedírnoslo… ¡vale la pena! 🙂